Noticias

Keidis, una Policía comprometida con la prevención de la violencia de género

Keidis Paola Sarmiento Castila es una patrullera de 21 años nacida en Valledupar y descendiente por parte de su padre del pueblo indígena Wiwa, de la Sierra Nevada de Santa Marta. Desde niña tenía claro que deseaba ser Policía. Gracias al Convenio de Becas estudiantiles suscrito entre la Policía Nacional – Embajada EE.UU. y con apoyo de la organización integrada por líderes Wiwa, logró alcanzar su sueño. Actualmente trabaja en La Paz y es una de las Policías que cursa los diplomados del proyecto Enfoque de Género en el Servicio de Policía – EMA, actividad que combina con la tareas de prevención ciudadana en la unidad desarrollando campañas y actividades con niños, niñas y adolescentes, así como con la población vulnerable del municipio. Lleva dos años en la Policía Nacional, incluyendo el tiempo que duró en la Escuela de Formación Carlos Eugenio Restrepo, en la ciudad de Medellín. Primero estuvo tres meses en el Servicio de Policía en Valledupar y luego fue asignada para La Paz, Cesar. Cuando sale de permiso viaja a Valledupar a visitar a su familia, compuesta por su madre, padre, un hermano y una hermana, ambos menores que ella. Según Keidis, el proyecto le ha permitido ponerse en el lugar de las personas y acercarse más a la comunidad. También ha podido participar en conmemoraciones especiales como el Día Internacional de la eliminación de las violencias contra las mujeres, el 25 de noviembre de 2018. En esta fecha, como parte del proyecto se organizó una actividad en la que varias mujeres compartían experiencias en las que fueron víctimas o testigos de algún tipo de violencia. Actividad que consistía en anotar en una tarjeta y luego se fundía en el fuego como símbolo de transformación y superación de esta etapa de dolor. “En esa ocasión pude evidenciar que a muchas mujeres les da miedo contar sus historias relacionadas con aspectos de su pasado, y que al final después de esta actividad lograron expresar sus sentimientos, algunos de ellos reprimidos”, aseguró Keidis. “Para mí tuvo un significado muy fuerte, porque aunque no he vivido la violencia de género en carne propia, mi mamá y otras mujeres que conozco sí, y pensé en ellas y en que muchas veces estas mujeres no tuvieron la oportunidad de tener un trabajo que les brindara independencia y autonomía, y por esto se les dificultaba denunciar por miedo y/o temor a lo que pudiera pasar con ellas y sus hijos “, agregó. Para esta mujer Policía, es clave que se les enseñe a las mujeres y las madres la importancia de sus derechos, que sean emprendedoras y por ende independientes, así como lograr involucrar a todos los hombres en este tipo de talleres para crear conciencia en ellos, pues son estos los principales generadores de la violencia basada en género. “Lo más importante que me ha enseñado este proyecto es que he aprendido que como mujer tengo derechos y me asiste ahora el deber de transmitirlo, como los protocolos para la atención en caso de violación y muchos aspectos de los derechos de las mujeres en estas situaciones de riesgo”, concluye Keidis. Su proyección dentro de la institución es pertenecer al grupo Infancia y Adolescencia dentro de la Policía Nacional, y poder ser multiplicadora de este proyecto en la comunidad a través de charlas y actividades que contribuyan en la prevención de la violencia basada en género. El proyecto Enfoque de Género en el Servicio de Policía se implementa en conjunto por la Policía Nacional, Alianza para la Paz e Interpeace, con recursos del Fondo Multidonante de las Naciones Unidas para el Sostenimiento de la Paz y el apoyo el técnico de ONU Mujeres Colombia.